Si alguna vez te has topado con un bibliotecólogo y le has hecho la típica pregunta “¿Y para eso se estudia?” Entonces este artículo es para ti. En principio, debemos decirte que sí, si se estudia. La Universidad Central de Venezuela y la Universidad del Zulia, son las 2 casas de estudios encargadas de formarlos.

Pero además, los bibliotecólogos no venimos solos. Existe una serie de profesiones poco comunes, pero necesarias que también debes conocer: archivólogos, museólogos, documentalistas, entre otros. Y vamos todos hacia el mismo objetivo. ¿Quieres saber cuál es? Quédate hasta el final y descubre quién es este profesional.

¿Bibliotecólogo o profesional de la información?

El quehacer de un bibliotecólogo es muy variado y dinámico. Incluso, dependiendo de esto, puede tener un perfil particular. En vez de tratar con un bibliotecólogo, podríamos estar frente a un:

  • Bibliotecario
  • Bibliotecónomo
  • Bibliotecnólogo

Por ello, como especialista en el área, prefiero incorporarlo dentro del grupo de los llamados profesionales de la información, junto a los:

  • Archivólogos
  • Documentalistas
  • Comunicólogos
  • Museólogos

¡Sí! Uno de los expertos que se desarrolla en cualquier etapa de la gestión de la información. Por supuesto, esta definición minimalista no resume su alcance. Sin duda, ver al profesional de la información como un todo sistémico es un tema digno de otra publicación. Pero por ahora nos enfocaremos en definir cada uno de sus perfiles:

Bibliotecólogo: arquitecto de las soluciones informacionales

Llegar a ser bibliotecólogo implica pasar por determinados procesos que permiten la adquisición de conocimientos, habilidades, experiencia y actitudes específicas. Se trata de un profesional que ha evolucionado y ha llegado al punto más alto del eslabón de esta área del conocimiento.

El bibliotecólogo tiene una formación teórica y práctica. Pero su mayor aporte a la bibliotecología es hacer ciencia. Por ello, podemos definirlo como el profesional de la información que detecta, investiga, teoriza y construye soluciones para resolver problemas o vacíos informacionales haciendo uso de métodos científicos.  

Entonces, ¿cuáles son las competencias de un bibliotecólogo? A nivel de conocimiento, habilidades y actitudes un bibliotecólogo debe:

  • Saber construir epistemología, definir objetos y aplicar métodos para el desarrollo de las ciencias de la información.
  • Diseñar los procesos de la gestión de información de acuerdo con normas de calidad.
  • Desarrollar proyectos, productos y servicios de información para la investigación.

Y como tienen la capacidad de trabajar el pensamiento de forma sistémica y compleja; estos profesionales son capaces de hacer propuestas legislativas, entre otras actividades inter y transdisciplinarias.

Bibliotecónomo: administrador de los procesos

Por otra parte, tenemos al bibliotecónomo, aquel profesional dedicado a resolver los aspectos administrativos y de funcionamiento de una biblioteca. Aunque esta figura “desapareció” académicamente en Venezuela cuando la Escuela de Bibliotecología y Archivología hizo su cambio de pensum en 1952, su perfil sigue integrado en el quehacer.

¿Qué diferencia hay entre estos profesionales de la información? A diferencia del bibliotecólogo, el bibliotecónomo centra sus objetivos en optimizar la operatividad de los procesos técnicos y administrativos de una unidad de información. Por tanto, sus competencias abarcan:

  •         La planificación estratégica y operativa de los procesos técnicos.
  •         La adquisición de nuevos recursos de información
  •         La gestión de los productos y servicios de información.

Este profesional de la información es el que, por experiencia, dirige las unidades de información, sean bibliotecas, museos, centros de documentación, CRAI. No obstante, existe un miembro más de este equipo; aquel que lleva a la realidad las soluciones que diseña el bibliotecólogo y que planifica el bibliotecónomo: el bibliotecario.

Bibliotecario: ejecutor de los procesos

El bibliotecario es aquel profesional de la información que todos conocemos. El que está atento a las dudas, preguntas y sugerencias de los usuarios. Sí, el mismo que nos indica que debemos hacer silencio y no comer en los espacios de la biblioteca.

También es el profesional que más ha aparecido en las películas. Y el que más ha ganado Oscars ¡No lo crees! Qué me dices de Breakfast at Tiffany’s o Fantastic Flying Books of Mr. Morris Lessmore. Y es que no es para menos, el interés por investigar más allá de la pregunta y resolver la duda, le ha dado un lugar en ese podio.

Los bibliotecarios son la pieza operativa, sin ellos, la planificación para el servicio no podría ser ejecutada. Por ello, deben ser capaces de transformar el conocimiento técnico en aprendizaje significativo, de la mano de competencias comunicacionales y actitudinales; tales como: escucha activa, proactividad, flexibilidad, creatividad y empatía.

Bibliotecnólogo: gestor de las tecnologías

También conocido como infotecnólogo, gatekeeper o cibertecario, el bibliotecnólogo llegó para completar el equipo. Desde que la primera base de datos llegó a la biblioteca (OIT, 1965), las necesidades informáticas se hicieron mayores, y con ello, la existencia de nuevos productos y servicios.

Específicamente en Venezuela, la formación del bibliotecólogo contempla tímidamente los aspectos informáticos en sus diseños curriculares; por ello, la migración de este profesional a la biblioteca viene de la computación o de la ingeniería de sistemas.

No obstante, el bibliotecólogo al enfocarse en el desarrollo de competencias infotecnológicas; a través de especializaciones, cursos o diplomados, debe ser capaz de:

  • Programar los metadatos de los módulos de sistemas de gestión de información.
  • Diseñar tesauros referenciales en línea.
  • Desarrollar Recursos y servicios de información en línea.

Como hemos visto, el bibliotecólogo, el bibliotecónomo, el bibliotecario y el bibliotecnólogo son parte de algo más grande. De un grupo de profesionales que  se encargan de diseñar; crear; coordinar y llevar los recursos de información a otro nivel: al conocimiento. ¿De quiénes? De ustedes, nuestros usuarios. 

Texto: Evelyn Guerrero Mass/Fotos: Manuel Sardá