La incorporación de la inteligencia artificial (IA) es, según el artista plástico y tecnólogo Ricardo Arispe, “la nueva revolución social”. Y es que, a pesar de no ser un concepto nuevo, el impacto de esta tecnología ha alcanzado todos los ámbitos de nuestra sociedad.

Pero hoy es la academia, el principal ente que atizó el desarrollo de esta tecnología, quien se cuestiona los aportes de la inclusión de la IA al quehacer diario del ser humano. La alarma de la comunidad educativa nace, principalmente, por la variedad de lenguajes generadores de texto en respuesta a las solicitudes de los usuarios, las cuales no están exentas de incurrir en plagio.

No es plagio, pero no es tu trabajo

En un artículo de prensa publicado el pasado 19 de abril del año en curso por Telemundo Miami, diversos educadores manifiestan su ferviente preocupación por el uso -no regulado- de la IA en el aula de clase.

Según un censo realizado en la comunidad docente de Broward, cerca del 22% de los estudiantes usa -bajo fines académicos- aplicaciones como: Grammarly, GPT-2, Google Bard y ChatGPT. Estas aplicaciones pueden generar desde ensayos y artículos académicos, intervenir un texto para modificar su gramática y ortografía hasta desarrollar planes  estratégicos de mercadeo y negocio.

La comunidad docente y de profesionales comunica que aún se mantienen estudiando las implicaciones y aplicaciones de la IA. De acuerdo a la Federal de Derechos de Autor, aquel contenido intelectual creado por la IA no infringe en plagio, ya que no hay una persona responsable o creadora, es decir, no se concibe como obra el contenido producido por un software. Por consiguiente, podría otorgarse poca relevancia el hablar de reconocimiento de los derechos exclusivos del autor. 

El Centro Cultural y de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CeCRAI) como ente formador, de divulgación y apoyo de la ciencia, el arte y la cultura promueve en el desarrollo y fortalecimiento de la ética en la academia. Así, al hacer uso de herramientas como la IA insta a reconocer su responsabilidad e implicación en el contenido que desarrollemos. Porque no es plagio, pero no es tu trabajo.

¿Cómo reconozco la responsabilidad de la IA en el desarrollo de mi obra?

La particularidad del uso de aplicaciones como ChatGPT o Google Bard es que, podemos introducir las mismas indicaciones o interrogantes en momentos diferentes y las respuestas tendrán variaciones significativas. Es decir, siempre obtendremos una respuesta diferente. Entonces, ¿cómo citar o referenciar este tipo de comunicaciones en mis trabajos académicos? 

Las Normas APA, una de las normas de estilo de citación más utilizada en el mundo, en su última edición (7ma ed.) aún carece de un apartado específico dedicado a detallar cómo reconocer la producción intelectual de la inteligencia artificial.

Sin embargo, recientemente publicó un artículo titulado How to cite ChatGPT, donde señala que el contenido generado por este software no es una comunicación personal (aunque cumple con algunos de los principios, carece de otros). Asimismo, puntualiza que se debe acreditar en las referencias y en las citas al autor del algoritmo empleado.

Si deseas más detalles acerca de cómo aplicar las Normas APA 7 al momento de citar y referenciar las diversas fuentes de información hoy existentes, consulta nuestro calendario e inscríbete en los talleres formativos.

Comunidad docente, la IA es tu amiga no tu enemiga

Hoy, la Universidad se mantiene trabajando en pro de idear alternativas que permitan reconocer la participación de la IA en las obras intelectuales. Para esto se presentan objetivos como: identificar el tecnicismo empleado por la IA al presentar sus respuestas y establecer en sus asignaciones interrogantes complejas que requieren no solo discernir sino también activar aspctos como la empatía para la resolución de lo planteado.

¿Te gustaría conocer más acerca de la inteligencia artificial? Aquí te compartimos algunos de los libros centrados en este tema agregados -recientemente- a nuestra colección. Y, ¿sabes qué es lo mejor? Estos libros los puedes encontrar en nuestras salas:

Texto: Paoly Gamboa/ Imágenes: Bing